[…] Porque la única gente que me
interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por
hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que
núnca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos
cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas, y entonces
se ve estallar una luz azul y todo el mundo
suelta un “ahhh!”.
No se que tiene esta frase, pero es una de mis favoritas, claramente.